Lo primero saludar a todos después de tanto tiempo de sequía bloggera.
Aquí os presento al gran culpable de ello mi hijo Inhar que tan ocupado me tiene.
Inhar en brazos de la orgullosa abuela.
Esta pasado primavera tuve el placer de disfrutar de unos días de esquí en buena compañía en tierras búlgaras. Así que sin más dilación aquí os dejo la primera entrega. Iré añadiendo poco a poco según me vaya dejando el pequeñajo.
El viaje de ida lo hicimos saliendo de Bilbao Igor, Joseba, Xabi y yo (posteriormente se nos sumarán Carlos y Luismi) con escala en Munich, y como buenos turistas hay que amoldarse a las costumbres del lugar que mejor que unas buenas pintas de cerveza.
Foto Xabi
El viaje en si no es excesivamente largo y a pesar de volar en pequeños aviones un tanto incómodos las ganas lo suplen todo.
Llegada al aeropuerto de Sofia
La facturación del equipaje lo hicimos directamente a Sofia.
Foto Igor. Con las maletas ya recogidas esperando los esquís. Pobres ingenuos...
Pues eso, con las maletas ya recogidas, y esperando todo el material duro que no salía. Casualidad otros dos chicos recogieron sus esquís pero nosotros seguiamos igual, y tras preguntar varias veces y después de un buen rato esperando, se hacen realidad nuestras sospechas. Los esquís se han quedado en Munich, en el trasbordo parece ser que no los han metido en nuestro avión, y según uno de los tecnicos llegarán en el siguiente vuelo. Ese mismo día pero a la noche. Por lo que decidimos hacer algo de turismo obligado por Sofia.
Xabi conduciendo la kangoo que se encargo él de alquilar.
Foto Igor. Sofia
Familiarizándonos con el lenguaje autóctono. De vocales andan justos....
Catedral Alexandre Nevsky
Iglesia San Nikolai
Aprovechamos para cenar mientras debatíamos las opciones para el día siguiente con el retraso inesperado por el tema de los esquís.
Cenar en Sofia es bastante económico y desde luego con hambre no te quedas.
Tras recuperar los esquís nos dirigimos hacia nuestro alojamiento, y como ya íbamos mal de tiempo pues el Tomtom decidió jugárnosla y añadir al viaje un par de horitas más.
Pasadas muy pocas horas de sueño amanecemos de esta guisa en nuestro alojamiento.
Estamos en Borovets y nuestro objetivo del día es el Musala en la cordillera de Rila, que con sus 2925m. es la cima más alta de Bulgaria.
Foto Joseba. Pinos nevados.
Foto Xabi. 4x4 de la zona.
Usamos las istalaciones de la estación de esquí de Borovets para llegar a su punto más alto, y de aquí descendemos en busca del limite de la estación para dirigirnos hacia nuestro objetivo.
Foto Joseba. Saliendo a toda pastilla de la estación por una cómoda pista de moto de nieve.
Foto Igor. El que suscribe durante la ascensión.
Tras un rato de subida llegamos a un lago helado donde se encuentra un antiguo refugio abandonado y ya vemos el Musala. Subiremos por la vía normal, la cual esta señalada por unas estacas metálicas y bajaremos por el evidente corredor.
Foto Joseba. Xabi, Igor y yo abanzando.
A pesar de que el día se esta cerrando, de vez en cuando nos deja ver el entorno, el cual tiene muchas posibilidades atractivas.
El tiempo sigue empeorando y nos obliga a abrigarnos bien. Vamos en busca de la arista que nos llevará hasta la cima.
Foto Xabi.
Una vez en la arista, esquís a la chepa y no la dejamos hasta la cima. Lástima de los postes que afean un poco una arista con bonito ambiente.
Foto Joseba.
Algún tramo aunque sin dificultad, nos obliga a echar manos a la roca para seguir progresando.
Foto Joseba. Xabi metiéndose en harina.
Joseba pisando el techo de Bulgaria. Menudo estreno!!!!
Foto Joseba. Los 4 en la cima.
Junto a la cima se encuentra un refugio con una estación meteorologica, lugar donde vive una persona, y tambien tiene una pequeña zona abierta con una mesa y unos bancos que hace muy cómodo el abrigarse y comer algo al refugio del viento que soplaba.
Foto Igor. Refugio de cima.
Foto Igor.
Foto sacada a un poster del refugio en el que viene indicada la ruta de ascenso al Musala.
Tras un rato de descanso y con todo el material para bajar preparado nos dirigimos hacia el corredor que nos llevará hasta el lago por el que pasamos en la subida.
Foto Joseba. Igor entrando ante la atenta mirada de Xabi.
Foto Joseba. Igor y yo reagrupándonos a mitad de tubo. Pena de meteo...
Xabi y Joseba comenzando con la diversión.
Xabi cogiéndole el pulso a la nieve cambiante mientras Joseba observa.
Foto Xabi. Yo a punto de salir del tubo.
Foto Xabi. Igor gozando en una zona con menos pendiente.
De aquí decidimos poner de nuevo focas y subir al Irechek para así hacer luego un descenso más directo hacia la estación de Borovets.
Xabi subiendo con su split seguido por Joseba.
Foto Xabi. Igor y yo foqueando.
Aquí hay un momento según vamos subiendo que oigo un crack y veo como se abre una pequeña grieta. Me apresuro a avisar a mis compañeros, que salgan de la zona cuanto antes, pero no da tiempo. en seguida se oye un crack más grande y lo siguiente que yo veo es esto.
Foto desde mi posición.
Gracias a una roca que hay unos metros por encima mio, no me arrastra el alud de placa. La verdad es que se me ponen los pelos de punta. El corazón se acelera e intento ir viendo por donde van mis tres compañeros tomando como referencias las pocas rocas que asoman temiendo lo peor. El momento es tenso de narices, ya que hay veces que debido al "oleaje" de bloques dejo de verlos durante algunos segundos. Cuando todo se para y veo que los tres han quedado parcialmente enterrados pero que se valen por si mismos respiro aliviado.
Más de cerca. Igor ayudando a Xabi a sacar sus tablas de debajo de los bloques.
Foto Joseba. Dichosa roca.
Foto Joseba. Igor ayudando a Xabi.
Foto Joseba. La linea por donde a roto la placa y yo al resguardo de la roca.
Una vez bajo hasta su posición, hacemos recuento de material y nos damos cuenta que la única baja es un bastón de Joseba. Nos sentimos afortunados, y con la flojera en las patas decidimos regresar por el camino de subida.
Foto Joseba. Yo bajando hacia la estación.
Foto Joseba. Yo agrupándome con Igor.
Una vez en la estación nos aprovechamos de sus dominios para regresar hasta donde hemos dejado el vehículo y así damos por finalizada nuestra primera jornada.
Para más información sobre itinerario seguido, desniveles, etc os remito al blog de Joseba. El cual lo ha dejado perfectamente explicado como suele ser costumbre en el:
